El Betis no le ve el Humo a los Madrilistas

El Real Madrid se paseó en el Benito Villamarín ante un Betis que demostró por qué es el colista de la Liga (0-5). El club andaluz está en un estado de nervios, de ansiedad realmente preocupante para sus intereses y que después de ver el partido ante el Real Madrid, uno tiene la sensación que tiene difícil arreglo. El Betis salió ofensivo, dispuesto a buscar la reacción ante un Real Madrid que buscaba en el Benito Villamarín acostarse con los mismos puntos que Barça y Atlético de Madrid. Una apuesta valiente y quizás demasiada osada de Garrido que en lugar de apostar por reforzar su sistema defensivo, optó por todo lo contrario.
Y lo acabó pagando porque eso provocó que el Madrid, con Cristiano, Bale, Benzema, Di María y un espectacular Modric, encontrara todos los huecos del mundo. A pesar de que el Betis comenzó manando y que incluso Marcelo pudo haberse ido a la ducha por dos faltas que eran amarillas pero no vio ninguna, el primero en marcar fue el Real Madrid. Cristiano agarra un balón, se va hacia el centro y suelta un disparo desde la frontal ante el que nada puede hacer Andersen que hizo la estatua. No podía hacer nada ante ese golazo que suponía el 0-1 en el minuto 10.
El Betis buscó la reacción pero era el Madrid el que seguía llegando con más peligro con Cristiano como gran protagonista. Precisamente de una falta sobre él nació el 0-2 en el minuto 25. El portugués le dejó lanzar el libre directo a Bale que puso el balón por encima de la barrera y batió a Andersen que, de nuevo, hizo la estatua. Eso le valió la bronca de su afición que también pidió la marcha de Garrido.
El encuentro estaba sentenciado para el Madrid y aunque el Betis buscó entrar de nuevo en el partido, lo que pasó es que Benzema puso el 0-3 en el añadido de la primera parte tras una gran jugada de Modric. Así se llegó al descanso de un partido que la única historia que tenía en el segunda mitad era saber cuantos goles más iba a marcar el Real Madrid. Esos segundo 45 minutos fueron un paseo militar para los blancos que pudieron acabar ganando por una goleada histórica. Cristiano tuvo ocasiones para aburrir, pero esta vez se encontró con Andersen que paró todo lo que no hizo en la primera parte. Sin embargo, el meta del Betis no pudo atajar en el minuto 61 un gran disparo de Di María desde la frontal que suponía el 0-4 para el Real Madrid.
De ahí hasta el pitido final, lo que pasaba en el césped tenía un interés relativo porque lo que importaba estaba en la grada. La afición del Betis no paraba de pedir la marcha de Garrido y de increpar a la directiva del club. El esperpento bético acabó con el 0-5 de Morata que en el minuto con una soprendente pasividad de la zaga del equipo andaluz.